Un nuevo caso de brutalidad policial se vivió en Estados Unidos. Tras haber recibido ocho disparos en total, el padre de Jacob Blake aseguró que su hijo se encuentra paralizado de la cintura para abajo, situación que ha provocado una nueva ola de protestas en el país por los conflictos raciales.
Tras un incidente doméstico ocurrido el pasado domingo, Jacob Blake recibió ocho balazos por parte de un policía de Kenosha, Wisconsin, al querer subirse al auto donde se encontraban sus tres hijos. Este incidente volvió a encender las protestas en Estados Unidos por la brutalidad policial que existe en el país en contra de las personas de raza negra.
El gobernador de la ciudad, Tony Travers, al enterarse de lo que había ocurrido, aseguró a través de su cuenta de Twitter que “Jacob Blake recibió varios disparos en la espalda, a plena luz del día. Si bien aún no tenemos todos los detalles, lo que sabemos con certeza es que él no es el primer hombre o persona de raza negra en ser baleado, herido o asesinado sin piedad a manos de individuos de las fuerzas del orden”.
El Gobierno estadounidense impuso un toque de queda en Wisconsin desde ayer a las 20:00 horas hasta las 07:00 de la mañana de hoy, sin embargo, eso no evitó que se realizaran protestas en este condado. Desde la policía de Kenosha aseguraron que los involucrados fueron suspendidos de sus cargos y van a realizar una investigación del caso.
Por Gabriel Valenzuela
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