El gobierno alemán, dirigido por la canciller Angela Merkel, decidió extender la cuarentena en su país hasta el 7 de marzo, y señalaron que, entre las razones para optar por la medida, fueron las nuevas variantes de coronavirus, como la originada en Reino Unido.
"Los esfuerzos de los ciudadanos por lograr un descenso de los contagios han dado sus frutos, lo que les agradezco desde aquí", manifestó Merkel.
El día de hoy, Alemania registró una tasa de incidencia de 68 contagios, y según detalló Deutsche Welle, pretende bajar el número de infectados a menos de 35 por cada 100.000 habitantes semanalmente.
De momento, la nación europea mantiene cerrados sus restaurantes, instalaciones de ocio y tiendas de productos no esenciales, junto a las escuelas y centros educativos. Aunque varios estados federales pretenden comenzar un proceso de reapertura para los establecimientos educacionales. Y a eso se suma que, a partir del 1 de marzo, podrán volver a funcionar las peluquerías, salones de belleza y pedicure.
La canciller, junto a los gobiernos locales, volverán el 3 de marzo a decidir si continúa o no el confinamiento en su país.
Por Bruno Mansilla